A su hijo adolescente lo van a operar. Quizás a usted le preocupe cómo lidiará con esta experiencia el adolescente. Si saben lo que pueden esperar, tanto usted como su adolescente se sentirán mejor sobre la cirugía.
¿Cómo reaccionará el adolescente?
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Los adolescentes podrían temer que la cirugía les vaya a causar dolor. También podría preocuparles que afecte a su aspecto.
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Los adolescentes podrían preocuparse porque van a faltar al colegio y estar lejos de sus amigos.
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Además, les mantener su privacidad y guardar una cierta distancia de sus padres y otros adultos. El hecho de estar enfermos u hospitalizados podría hacerles sentir que han perdido la privacidad y el control.
¿Cómo puede ayudar a preparar a su hijo adolescente para la cirugía?
Los adolescentes tienen la edad suficiente como para entender los detalles de la cirugía. Hable con su hijo sobre la cirugía en cuanto se fije la fecha. Estas son algunas de las cosas que puede hacer para ayudarlo a prepararse:
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Respete las opiniones del adolescente, así como su derecho a tomar decisiones. Permita que su hijo participe en las decisiones sobre su cirugía.
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Hable con su hijo sobre lo que sucederá en el hospital. Ayude a su hijo a entender el motivo de la cirugía. Remítalo a libros o recursos en línea para obtener más información, si es necesario.
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Haga una visita al departamento de cirugía junto con su adolescente, si el hospital ofrece esta opción. Anime a su adolescente a hablar con los miembros del personal del hospital y a hacerles preguntas.
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Respete la privacidad de su adolescente; quizás su hijo quiera hablar a solas con el personal del hospital. Además, el personal del hospital quizás tenga que hablar con su hijo adolescente en privado sobre asuntos de salud que pueden afectar la seguridad de la cirugía.
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Póngase a la disposición de su hijo cuando necesite apoyo.
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Aliéntelo a expresar sus sentimientos.
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Si su hijo lo solicita, pregunte al personal del hospital si sus hermanos o amigos pueden hacerle visitas.
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Cuando esté en el hospital, conserve los hábitos normales de su hijo en la medida de lo posible, en especial si va a permanecer hospitalizado por un tiempo prolongado. Anímelo a mantenerse al día con sus deberes escolares y a seguir en contacto con sus familiares y amigos.
Muchos hospitales cuentan con un especialista en la vida infantil. Esta persona está capacitada para ayudar a los niños a comprender y afrontar su experiencia en el hospital. Las familias pueden hacer una cita para ver a su especialista en la vida infantil cuando su hijo tenga una fecha para la cirugía. El especialista en la vida infantil puede ayudar a explicar la cirugía, contestar preguntas y recomendarle otros recursos a su adolescente, si es necesario. Se alienta a los padres y los hermanos a que asistan a estas sesiones y participen en ellas.
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