Si usted cuida adecuadamente su herida, lo ayudará a sanar. Su proveedor de atención médica o el personal de enfermería le pudo haber mostrado específicamente cómo limpiar y vendar la herida y cómo saber si la herida está sanando de manera normal. Este documento lo ayudará a recordar los consejos y los pasos a seguir cuando esté en su hogar.
Preparación
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Lleve a los niños y las mascotas a otro cuarto, lejos de donde atenderá su herida.
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Lávese las manos antes de tocar los materiales:
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Abra la llave del agua.
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Mójese las manos y las muñecas.
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Use jabón líquido de un dispensador con bomba. Haga mucha espuma.
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Lávese bien las manos durante, al menos, 20 segundos.
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Enjuáguese las manos con los dedos apuntando hacia abajo.
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Séquese las manos con una toalla limpia o una toalla de papel. Con esta toalla, cierre el grifo.
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Recuerde que después de lavarse las manos no debe tocar nada, salvo los materiales. Lávese las manos otra vez si toca algo más, como los muebles o la ropa.
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Limpie el espacio de trabajo:
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Limpie las superficies lavables con agua y jabón y séquelas con una toalla limpia o con una toalla de papel.
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Limpie las superficies que no son lavables (como tela o madera) para que queden sin polvo. Coloque un paño limpio o toalla de papel sobre el lugar donde va a trabajar.
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Aléjese del lugar donde va a trabajar si debe toser o estornudar.
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Junte todos sus materiales para la venda:
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Vendaje de gasa u otro material de venda
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Cinta adhesiva médica
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Guantes descartables
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Lávese las manos otra vez.
Colocación del vendaje
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Quite el vendaje que tenía puesto:
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Póngase los guantes descartables.
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Despegue la cinta jalándola con cuidado hacia la herida.
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Quite con cuidado el vendaje, capa por capa.
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Si tiene un drenaje o un tubo en la herida, cuide de no jalarlo.
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Mire el vendaje. Asegúrese de que haya una cantidad menor de sangre, y que toda la sangre se esté convirtiendo en un líquido claro color ámbar.
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Revise si hay puntos flojos (si le cosieron la herida).
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Coloque el vendaje usado en una bolsa de plástico. Luego quítese los guantes.
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Inspeccione la herida. Busque signos de que no está sanando normalmente. Una herida que no esté sanando adecuadamente podría verse de color oscuro o podría tener estrías blancas. Preste atención para ver si hay signos de infección. Por ejemplo, secreciones de color amarillo, verde y amarillo o hediondas, más hinchazón, dolor, calor o enrojecimiento en la piel alrededor de la herida.
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Trate la herida:
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Lávese las manos otra vez.
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Colóquese un par nuevo de guantes descartables.
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Limpie y vende la herida según le haya indicado el proveedor de atención médica o el enfermero.
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Si tiene un drenaje o un tubo en la herida, cuide de no jalarlo.
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Deseche todos los materiales usados o residuos en una bolsa de plástico antes de ponerlos en el bote de la basura.
Seguimiento
Programe una cita de seguimiento o según le indique el proveedor de atención médica.
Cuándo debe llamar a su proveedor de atención médica
Llame al proveedor de atención médica de inmediato si tiene cualquiera de los siguientes síntomas:
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Escalofríos temblorosos o fiebre de más de
100.4 °F (38 °C) -
Sangrado que empapa el vendaje
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Puntos que se caigan de la herida o se abran
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Líquido rosado que sale de la herida
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Aumento de secreción de la herida de color amarillo, amarillo-verdosa o maloliente
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Aumento de la hinchazón, el dolor o el enrojecimiento en la piel alrededor de la herida
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Cambio del color o del tamaño de la herida
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Aumento de la fatiga
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Pérdida del apetito
