La narcolepsia no tiene cura, pero se puede manejar con medicamentos y cambios en el estilo de vida. Trabaje con su proveedor de atención médica para establecer el plan de tratamiento más adecuado para usted. El apoyo de sus familiares y amigos también lo ayudará a enfrentar la narcolepsia en su casa y en el trabajo.
Trabaje con su proveedor de atención médica
Describa sus problemas de sueño a su proveedor de atención médica. Vaya preparado para responder preguntas sobre su historia clínica y familiar. Intente llevar un diario de las horas que duerme durante un par de semanas. Registre los horarios en los que se queda dormido y se despierta. Escriba también todos los síntomas que nota y lo que estaba pasando justo antes del episodio. Un estudio del sueño y un estudio de siesta diurna pueden ayudar a diagnosticar la narcolepsia. Su proveedor de atención médica le recetará el mejor medicamento para usted y le mencionará los posibles efectos secundarios.
Estudio del sueño
Los estudios del sueño se realizan en una clínica de tratamiento del sueño. Le colocarán sensores en la cabeza y el cuerpo para registrar las ondas cerebrales, la respiración y los movimientos del cuerpo. Vigilarán su sueño durante toda la noche por medio de un estudio llamado polisomnografía. También le harán un estudio de la siesta diurna que se llama prueba de latencias múltiples del sueño. Los resultados ayudarán a su proveedor de atención médica a diagnosticar la narcolepsia. Luego se podrá planificar su tratamiento.
La vida con narcolepsia
Los síntomas de la narcolepsia suelen afectar la vida diaria. Sin embargo, usted puede aprender maneras de sobrellevarla en su casa, trabajo o escuela. Pruebe estos consejos:
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Informe a sus familiares y amigos acerca de la narcolepsia y la atención especial que requiere.
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Únase a un grupo de apoyo para personas con narcolepsia. Allí podrá hablar sobre su problema de sueño. Puede compartir ideas sobre cómo sobrellevar los síntomas.
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Informe a su proveedor de atención médica cualquier cambio en los síntomas o en los efectos secundarios de los medicamentos.
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En el trabajo o en la escuela, dígale a su empleador, a los profesores o al personal de enfermería cuál es la atención especial que necesita.
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Si le da sueño mientras conduce, pare en un lugar seguro para dormir un poco.
Hábitos saludables
Estas costumbres saludables pueden ayudarlo a reducir los síntomas:
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Programe siestas breves durante el día. Las siestas planificadas ayudan a reducir la somnolencia.
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Mantenga un horario regular para dormir. Acuéstese y levántese a la misma hora todos los días.
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Haga ejercicio con regularidad. Pero no haga ejercicio intenso de 2 a 4 horas antes de irse a la cama.
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Evite o limite la cafeína, la nicotina y el alcohol antes de acostarse. No los consuma por varias horas antes de irse a dormir.
